Las lesiones de los costaleros son multifactoriales y dependerán de numerosas variables:
Tipo de paso, serán diferentes las lesiones y sobrecargas que se produzcan en función de la forma de caminar y cargar el paso. No serán iguales las lesiones de los costaleros que las de los cargadores. Tampoco serán los mismos riesgos de lesión en costaleros de palio, Cristo o misterio, siendo los primeros más propensos a sobrecargas en las piernas y en los gemelos.
Otra variable a considerar será el terreno, las aguas de las calles, las inclinaciones laterales, adoquinados, baches importantes y el estado del firme es un factor bastante determinante y que condiciona el trabajo y el esfuerzo de las cuadrillas de costaleros. .
Los factores ambientales también deben ser tenidos en cuenta, semanas santas tardías como es el caso requieren de una muy buena y abundante hidratación.
Las semanas santas con riesgo de lluvia requieren de concentración y coordinación ante posibles maniobras improvisadas.
Los factores emocionales y la alimentación también tienen un papel muy importante, evitar alcohol y comidas copiosas, preferiblemente pasta o hidratos en la comida son consejos que se deberían seguir.
Una buena iguala y una buena ropa evita posibles lesiones, asi como una buena técnica debajo de la trabajadera, sobre todo en los momentos donde más se puede lesionar el costalero, siendo las levantas, arrias y las maniobras especiales, salidas, entradas, media altura, las que más pueden repercutir en estos aspectos lesivos.
Las lesiones más comunes son:
- Sobrecargas musculares y contracturas
- Roturas fibrilares
- Erosiones a nivel cervical, 7ª vertebra (morrillo)
- Esguinces tobillo o de rodilla
- Lumbalgias
- Deshidratación, desvanecimiento, alteraciones de la frecuencia cardiaca.
Para evitarlas:
- Revisar estado de salud y la forma física
- Saber nuestras limitaciones
- Adquirir una buena técnica de trabajo.
- Utilizar una buena ropa, zapatillas deportivas que cubran bien el talon y tengan suela flexible
- Utilizar una buena faja, flexible, incluso se podría reforzar con una faja ortopédica, evitar las fajas rígidas de cuero.
- Utilizar un costal con tejidos adecuados y una morcilla semirrígida que sujete y amortigüe el impacto de la trabajadera sobre la 7ª cervical.
- La colocación de la ropa en general, pero sobre todo costal y faja.
- Ojo con los olvidos de cadenas, cuello elevado de camisetas y arrugas en el costal, pues suelen producir erosiones y lesiones cutáneas importantes.
En mayores de 50 años vigilar la densidad ósea, sobre todo a nivel dorsal, para evitar lesiones óseas.
La edad recomendada va de los 18 a los 55 años, aunque dependerá de la preparación y condición física de cada costalero, pudiendo ser inferiores o mayores en función de esta.
Los ensayos, la preparación física, una revisión médica. Junto a una buena técnica, una buena iguala, buena coordinación y atención y unas buenas ropas hacen que la labor o el oficio del costalero no entrañe grandes riesgos de lesión.
En nuestra clínica estaremos encantados de atenderte para que disfrutes de una buena estación de penitencia y también para recuperarte tras ella.