La fisioterapia geriátrica se basa en la aplicación de determinadas técnicas en adultos mayores en los que el avance de la edad ha desencadenado diferentes patologías que conllevan una disminución de sus capacidades funcionales y de su calidad de vida.
Estas técnicas intentarán disminuir el dolor, mejorar el equilibrio, reeducar la marcha, mejorar la sensibilidad y la funcionalidad articular, recuperar el movimiento, la fuerza, la elasticidad y la flexibilidad muscular perdida, en función de las necesidades de cada paciente.